Marel y Pronaca colaboran para garantizar las mejores soluciones de tratamiento de agua

La gestión eficiente del agua es una prioridad para Pronaca debido a su cultura y alto compromiso con la sostenibilidad y responsabilidad social. Los líderes en la industria de alimentos no solo se preocupan por cumplir con las regulaciones locales de vertido de efluentes, sino que también aspiran a alcanzar objetivos ambiciosos, como devolver agua de alta calidad al ambiente, que incluso, con los tratamientos adecuados complementarios, pueda ser utilizada por las comunidades donde operan. 

Reconociendo que cada instalación es única, la empresa Pronaca que destaca en Ecuador con su propósito de alimentar bien en base a una gestión eficiente, humana y sostenible, ha elegido a Marel como su socio tecnológico para desarrollar soluciones de tratamiento de aguas residuales industriales adaptadas a las necesidades específicas de cada unidad de procesamiento, ya sea para el negocio de aves, cerdos o productos de valor agregado.

Durante los últimos 15 años, Marel ha estado desarrollando sistemas de tratamiento de aguas residuales para satisfacer los requisitos específicos de cada planta de Pronaca. El proyecto más reciente, implementado este año en la nueva instalación de Pronaca en Puembo, marca el sexto sistema de tratamiento desarrollado a través de esta asociación. Los sistemas anteriores se instalaron en Santo Domingo, Yaruqui, Bucay, Durán y Pifo. 

Hector Ortiz, director Corporativo de Calidad y Ambiente de Pronaca, destaca que la asociación estratégica con Marel ha sido mutuamente beneficiosa. "Contamos con el apoyo técnico de Marel para encontrar las mejores soluciones que realmente satisfagan nuestras necesidades en cada situación, ya que cada centro operativo tiene características únicas", dice. "Marel nos ayuda a identificar las capacidades y diseños más adecuados para cumplir con los requisitos de cada centro", agrega, enfatizando que la sostenibilidad es un concepto en constante evolución y demanda nuevas tecnologías permanentemente.

"La evolución tecnológica de Marel contribuye a la eficiencia de los sistemas de tratamiento, ampliando las posibilidades de recuperación y reutilización del agua. Estos pasos posteriores son esenciales en nuestro camino hacia una gestión responsable del agua".

Además de cumplir con todos los requisitos legales, la empresa se centra en asegurarse de que el tratamiento de aguas residuales sea lo más eficiente y apropiado posible. "Consideramos si el agua tratada de manera eficiente puede en el futuro, con los tratamientos adecuados complementarios, ser potable y utilizada en la comunidad en lugar de simplemente verterla en el sistema de alcantarillado", explica el director. "Marel desempeña un papel importante al proporcionar tecnología y apoyo técnico para ayudar a Pronaca a abordar estos desafíos y lograr una gestión del agua más eficiente, sostenible y socialmente responsable".

Experiencia compartida

Juntos, Marel y Pronaca desarrollan proyectos de tratamiento de aguas residuales personalizados diseñados según las necesidades de cada planta. Marel es fundamental al proporcionar conocimientos técnicos que ayudan a Pronaca a diseñar e implementar soluciones efectivas.

"A lo largo de la fase de construcción e implementación, nos beneficiamos del apoyo continuo de los técnicos de Marel, que supervisan la instalación para garantizar precisión y eficiencia", dice el Sr. Ortiz. "Una vez que comenzamos la operación y el proceso de estabilización, seguimos recibiendo asistencia, tanto en el lugar como de forma remota. Este apoyo se centra en evaluar el rendimiento de la tecnología y cómo podemos optimizarla para lograr la mejor eficiencia. En resumen, Marel está presente en todo el proceso, proporcionando orientación y asistencia, asegurando que nuestras operaciones sean exitosas y eficientes".

Respeto por los recursos hídricos

La gestión adecuada de los recursos hídricos y la responsabilidad en su uso son fundamentales para la cultura de Ecuador. El país cuenta con un marco normativo que regula la recolección y el destino final de las aguas residuales. Según la legislación, las aguas residuales tratadas pueden utilizarse para la irrigación del suelo, verterse en el sistema de alcantarillado o devolverse a cuerpos de agua. Los requisitos de calidad para las aguas residuales tratadas varían según el destino o disposición.

Pronaca busca constantemente alternativas que vayan más allá del cumplimiento legal. "La razón de esto es que, en última instancia, nuestro objetivo no es solo cumplir con los requisitos legales, sino también sentar las bases para la recuperación y reutilización del agua en el futuro", dice el Sr. Ortiz. Esta opción se alinea con la filosofía de la empresa, que promueve constantemente la sostenibilidad. El director menciona el tratamiento de aguas residuales de las instalaciones de Pronaca como ejemplo de este compromiso: "En sistemas de tratamiento de agua que funcionan con el principio de lodos activados, estos  lodos se transforman a través de un proceso adecuado de compostaje en fertilizante, que se han utilizado en la agricultura durante mucho tiempo; igualmente en algunas operaciones el agua residual, después de tratada, se recupera para algunos proceso de limpieza, y en otros  sistemas de tratamiento se usa como fertiirrigación que permite reducir considerablemente la compactación y erosión del suelo y es, sin duda, es la forma de regar y proporcionar nutrientes al terreno del futuro porque reduce considerablemente el consumo tanto de agua como de fertilizantes . Este enfoque refleja nuestra participación en la economía circular, ya que siempre buscamos oportunidades para optimizar y gestionar adecuadamente los residuos". 

En los últimos años, Pronaca ha implementado acciones en todas sus instalaciones y centros operativos para garantizar el uso responsable, eficiente y racional de los recursos, especialmente el agua, la energía y los materiales, así como la minimización de residuos y el tratamiento de aguas residuales. La empresa ha establecido su estrategia para consolidar sus procesos de economía circular para 2035, dando un paso adelante en la promoción, el desarrollo y el apoyo a proyectos de circularidad, ecodiseño y reutilización de materiales.

Acerca de Pronaca

Pronaca cuenta con 100 centros operativos en todo Ecuador, entre granjas, plantas de proceso y centros de distribución y administración. Comenzó como un pequeño negocio familiar en 1957, creció de manera constante y se convirtió en un líder en el procesamiento de alimentos en Ecuador. La innovación está arraigada en su ADN corporativo y se considera esencial para desarrollar nuevos productos alimenticios y soluciones, así como los procesos utilizados para producirlos. La empresa se enfoca en la preservación del ambiente para garantizar que las futuras generaciones puedan seguir disfrutando de alimentos asequibles, deliciosos y de calidad.